El inicio de unas Fallas para muchos valencianos no lo marca la «cridá», si no la concentración de VespalaFalla 2025;
Este año no podíamos faltar a la cita y, como cada vez que llega Vespalafalla, nos juntamos varios amigos para disfrutar de un día que ya se ha convertido en tradición.
Desde primera hora de la mañana estábamos todos listos con nuestras Vespas, con los motores a punto y la ilusión de recorrer Valencia en buena compañía.

Creo que esta imagen se tomó en nuestra primera Vespalafalla allá por el año 2015.
Este VespalaFalla 2025 amaneció lloviendo, pero no podíamos faltar a la cita, en un par de horas estábamos listos, mi «gitana» la primavera de Irene y Jose Luis Trinidad, y en la Tmax Mayka y mi hermano Germán, para disfrutar de un día que ya se ha convertido en tradición.

Desde primera hora de la mañana estábamos todos listos con nuestras Vespas, con los motores a punto y la ilusión de recorrer Valencia en buena compañía.
El ambiente era espectacular: decenas de vespistas reunidos, cada uno con su estilo, desde motos antiguas restauradas con mimo hasta modelos más modernos.

Lo mejor fue poder compartir esa pasión con tanta gente y sentir cómo la ciudad entera se contagiaba del sonido de los motores y las sonrisas de quienes nos veían pasar.

La ruta fue una auténtica pasada. Recorrer juntos algunos de los rincones más emblemáticos de Valencia, en caravana, con esa mezcla de tradición fallera y cultura motera, es algo que no se puede explicar con palabras, hay que vivirlo. La gente nos saludaba, sacaba fotos, y comentaban el olor a motor de 2 tiempos que inundaba la ruta.

Después vino el almuerzo popular, la música y las charlas sobre motos, viajes y anécdotas. Fue un día redondo: risas, gasolina y amistad, todo con ese toque festivo que caracteriza a Vespalafalla.
Volvimos a casa cansados, no si antes comernos un cocido montañes en la Tierruca, con la satisfacción de haber vivido otra edición increíble.

Y ya estamos deseando que llegue la próxima, ¿Vespa Club Villa de Ayora en Octubre?….


Deja tu comentario